No obstante, las 10 zonas longitudinales
no son suficientes para colocar órganos y partes del cuerpo correctamente en el
pie, sino que solamente permiten una primera ordenación vertical.
Solamente mediante las 4 zonas
transversales, en las cuales el cuerpo está separado horizontalmente, es
posible una colocación de las zonas singulares, la cual es imprescindible para
el trabajo práctico de las zonas de reflejo en el pie.
Estas zonas transversales se orientan en
la articulación de los hombros, en el arco inferior branquial y en la base de
la pelvis. Esto entonces tiene como resultante las siguientes 4 áreas del
cuerpo:
- Área 1: Comprende la cabeza,
cuello y nuca hasta la línea transversal en la articulación de los hombros.
- Área 2: Llega desde la
articulación de los hombros hasta el margen inferior bronquial (puede tratarse
fácilmente debajo de la piel); incluye pues los órganos superiores hasta el
codo.
- Área 3: Comprende el abdomen
inferior y área de la pelvis hasta su base, la cual delimita el tronco en su
parte inferior, incluyendo los ante brazos y las articulaciones de la cadera.
- Área 4: Finalmente, la última
área, que comienza en la base de la pelvis, consiste en las piernas.
Zonas
longitudinales y trasversales (en color rojo) y su correspondencia con el pie
Imágen: http://dc97.4shared.com/doc/tpnFd89N/preview.html
No hay comentarios :
Publicar un comentario